Blog de Joselito

El pastillero

Siempre odié las pastillas. Nunca quería tomar una, ni siquiera cuando me dolía la cabeza. Antes de los 50 años no tenía ni historial médico, nunca pisaba el centro de salud o el Hospital. Tampoco me han operado nunca.

Pero a partir de los 50, en un exámen médico de empresa, me sacaron la tensión alta y los días siguientes fueron bastante malos. Ahí ya fui al médico, que se sorprendió que no tuviera historial anterior, y empecé a tomar pastillas. Desde entonces, con alguna cosilla que otra, he terminado tomando 6 pastillas diarias.

Compré un pastillero pequeño en un bazar chino para meter las pastillas de la tensión. El resto siempre las tengo en el mueble. Pero a veces he tenido que llevarme alguna al trabajo y ahí he echado de menos un pastillero más grande. Actualmente tengo este:

1

Ya hasta se le han borrado un poco las iniciales de los días.

Estas vacaciones mi suegra me vio las cajas de pastillas que llevé y me ofreció usar otro pastillero más grande. Lo acepté por no decirle que no, pero como veréis está bastante sucio. Prefiero comprar uno antes de ponerme a limpiar éste:

2

Pues ya veis, de odiarlas a tomarlas a diario. Sí, ya soy oficialmente un yayo.